Según un estudio reciente, los frutos secos pueden llegar a reducir la mortalidad en un 20%.
Las personas que comen siete o más raciones cada semana tienen un 20% menos de posibilidades de morir por problemas cardiovasculares, respiratorios o cancerígenos. Para llegar a este dato, fueron analizadas más de 100.000 personas durante más de 30 años en Estados Unidos, quienes no tenían ningún antecedente en este tipo de enfermedades.
El autor de este estudio, Ying Bao, comentó que no importaba el tipo de fruto seco, todos eran buenos según los datos.
El secreto no es otro que la cantidad de nutrientes que aportan al organismo. Según el profesor de la Universidad de Navarra Miguel Ángel Martínez González, hay fuertes razones para fomentar el consumo de los frutos secos a toda la población.
Se puede consultar el citado estudio en la revista New England Journal of Medicine.